Combustion Humana Espontanea (SHC)

¿Fantasía o Realidad?

La leyenda:
Por, aún desconocidas razones científicas,hay momentos en que una persona puede estallar en llamas e incinerarse. Las llamas comienzan dentro del propio cuerpo de la víctima y acaban por completo con ella, reduciendola a un montón de cenizas en cuestión de minutos - a veces segundos. Todo el evento es tan rápido y selectivo que los objetos cercanos a la víctima sólo muestran daño por calor de menor importancia. Estas llamas internas se han venido produciendo durante el tiempo que el hombre ha existido, pero la mayoría médicos forenses, patólogos, científicos y funcionarios del cuerpo bomberos ignorar tales pruebas y eligen explicaciones mucho más simples y menos controversiales de estas muertes sin explicación.


Una breve historia:
Muchos sostienen que la combustión humana espontánea ha sido documentada por primera vez en textos antiguos tales como la Biblia, pero, científicamente hablando, estos son demasiado antiguos y pasado por segundas manos para ser visto como una prueba fiable. Parece ser que la primera evidencia fiable histórica de SHC fue en  año 1763, cuando el francés Jonas Dupont publicó una colección de casos y estudios de combustión espontánea titulada "De Incendiis Corporis Humani Spontaneis". Dupont se inspiró para escribir este libro luego de conocer el caso de Nicole Millet, en el que se absolvió a un hombre por el asesinato de su esposa cuando el tribunal se convenció de que había muerto por combustión espontánea.
En 1800 se evidencia la creencia de SHC debido al número de escritores que se basan en esto para sus escenas dramáticas de muerte. La mayoría de estos autores fueron "hacks" que trabajaron en el equivalente del siglo 19 de los cómics "Penny Dreadfuls", por lo que no tuvieron mucha acogida, pero dos nombres grandes en el mundo literario también utilizaron como elemento al SHC y un causó un gran revuelo. El primero de estos dos autores fue el Capitán Marryat quien, en su novela Jacob Fiel, quien tomo detalles de un informe en el Times de Londres de 1832 para describir la muerte de la madre de su personaje principal, que se reduce a "una especie de ceniza grasosa".

Veinte años más tarde, en 1852, Charles Dickens utilizó SHC para matar a un personaje llamado Krook en su novela Bleak House. Krook era un alcohólico, fiel a la creencia popular en la que la combustión humana era causada por consumo excesivo de alcohol. La novela provocó un escándalo, George Henry Lewes, filósofo y crítico, declaró que SHC era imposible, y acusó a Dickens como un embustero. Dickens respondió a esta declaración en el prefacio de la 2 ª edición de su obra, dejando claro que había investigado el tema y sabía de decenas de casos de combustión espontánea. Los detalles de la muerte Krook en Casa Desolada fueron modelados directamente sobre los detalles de la muerte de la condesa Cornelia de Cesenate Bandi por esta vía extraordinaria, el único otro caso del que Dickens también extrajo detalles fue el de Nicole Millet que inspiró libro de Dupont a unos 100 años antes.

Después de lo ocurrido con Dickens, el interés general en el tema se enfrió hasta 1951, cuando el caso de Mary Reeser capturó la imaginación del público. En la mañana del 2 de julio de 1951, la señora Reeser se encontró, en su apartamento, reducida a un montón de cenizas y junto a la pila, había un craneo y un pie izquierdo completamente intacto.





Este evento se ha convertido en la base para muchos libros sobre el tema de SHC, entre la que destaca  "Fuego del cielo" por Michael Harrison, impresa en 1976. Fuego del Cielo se ha convertido en la obra de referencia estándar en la combustión humana espontánea.


En 1974, en Georgia, Estados Unidos, Angel se fue a dormir y despertó cuatro días mas tarde con unas quemaduras tan horribles que fue necesario amputarle el antebrazo derecho. Por otra parte, el pijama y las sabanas de la cama estaban intactos y no sintió ningún dolor hasta varias horas después de haber recuperado la conciencia. Angel no pudo recordar como se hizo las lesiones, incluso bajo regresión hipnótica.