martes, 22 de octubre de 2013

Annabelle: La muñeca Poseída

 De todas las muñecas poseídas, la más famosa es Annabelle, que en los años 70 causó auténtico pánico a todos los que la rodeaban. Su historia se incluye en el libro de Gerald Daniel Brittle The Demonologist.

La historia comienza cuando el padre Hegan se pone en contacto con Ed y Lorraine Warren, investigadores de fenómenos paranormales, y les informa de que las dueñas de la muñeca se pueden comunicar con ella y creen que se trata de la manifestación de un espíritu. Aunque al principio parecía un juego inocente, se convirtió en un ataque físico y psicológico que nunca olvidarían.

Las dueñas, Angie y Donna, les contaron historias acerca de Annabelle, con tanta familiaridad que los Warren pensaron que se trataba de una amiga. Por eso, al decirles que se trataba de la muñeca, pensaron que era una broma. La muñeca, que era del tamaño de un niño de 4 años, se encontraba sentada en el sofá de la sala. Explicaron que se trataba de un regalo de la madre de Donna, y que hacía un año habían empezado las actividades paranormales en torno a ella: cambiaba de posición y de lugar, se movía....

En un principio no le dieron más importancia, pero con el tiempo, la dejaban en posiciones determinadas a propósito para después comprobar que estaba en otra diferente: cruzaban sus brazos y, al llegar a casa, estos estaban rectos, la dejaban tumbada y aparecía sentada en otra habitación, incluso llegó a aparecer arrodillada sobre una silla, a pesar de que era imposible que mantuviese el equilibrio en esa posición al colocarla así.

Empezaron a aparecer notas escritas con letra infantil en las que se leía Ayúdanos o Ayuda a Lou, a lápiz, y en un papel que ellas no reconocían, concretamente de pergamino. Las chicas temían que alguien se estuviese colando en su apartamento para asustarlas, así que ponían marcas en las puertas y objetos colocados en una determinada posición para ver si alguien entraba.

Los sucesos iban a más: una tarde, al entrar en casa, encontraron el pecho y la mano de Annabelle cubiertos de sangre, aparecían envoltorios de caramelos en la casa, una figura se elevó sola y cayó contra el suelo.... Todo se volvió escalofriante, y decidieron entrar en contacto con una medium que les dijo que una niña de 7 años llamada Annabelle Higgins había muerto hacía tiempo allí, que quería entablar contacto con personas jóvenes, y por eso había empezado a mover la muñeca.

Donna y Angie pensaban que se trataba de algo inofensivo, así que "permitieron" vivir al espíritu en la muñeca. Y así fue como la muñeca quedó poseída.

Pero Lou, el prometido de Angie, creía que la muñeca tenía propósitos oscuros. Decía que tenía pesadillas a menudo con ella, y que en cierta ocasión en la que estaba dormido, sintió un peso ligero en los pies de la cama. Al moverse, descubrió a la muñeca con las manos en su cuello tratando de ahogarlo. En otra ocasión, Angie y Lou se encontraban revisando los detalles de un viaje cuando escucharon un ruido muy fuerte en la habitación de Donna. Al ir a comprobar qué había pasado, encontraron a la muñeca tirada en un rincón. Lou fue a cogerla, y sintió que había alguien detrás de él. Al girarse, gritó de dolor, y Angie pudo comprobar que Lou tenía sangre en el pecho, producida por 7 rasguños, que desaparecieron a los dos días sin dejar marca. Entonces, decidieron contactar con el sacerdote.

Los Warren llegaron a la conclusión de que habían permitido la entrada a un demonio que se aprovechó de ellas, y que con el tiempo las cosas se volverían más violentas. El padre Cooke realizó un exorcismo, pero aún así, las chicas pidieron que se llevasen a la muñeca de su casa.

Ed la metió en el maletero de su coche, y durante todo el trayecto, pudo sentir una energía muy pesada, sobre todo en las curvas peligrosas en las que el coche parecía no responder. La rociaron con agua bendita para "diluir" la presencia hasta su casa. Los días siguientes la muñeca permaneció sin moverse en una silla, pero poco a poco la actividad comenzó de nuevo: levitación, temblores, cambios de posición y lugar... Un gato negro comenzó a aparecerse junto a la muñeca. Rondaba algunos objetos que había en la casa, volvía junto a ella y desaparecía.

Además, los mensajes que los sacerdotes dejaban en el contestador aparecían entrecortados con extraños gruñidos. Incluso provocó un fallo en los frenos del coche del padre Bradford, que se había burlado de ella diciendo que tan solo era una muñeca.

Algunas personas que visitaron a los Warren pudieron ver cómo se movía Annabelle, y como en las fotografías una serie de luces parecían envolverla...

lunes, 21 de octubre de 2013

El Caso de la Familia Smurl: Posesión Demoníaca


La familia Smurl afirma que, entre 1974 y 1987, su casa estuvo habitada por un demonio que causaba ruidos y malos olores, abusaba física y sexualmente de ellos, movía objetos..

La casa de Jack y Janet Smurl en Pittston, un duplex construido en 1882, en el oeste de Pennsylvania, fue el escenario de uno de los más horribles y más famoso de América de posesión demoníaca, entre los años 1974 y 1989. El caso de Jack y Janet Smurl todavía sigue en debate en cuanto a la veracidad de los hechos.

Su historia comienza en 1973, cuando los Smurl compran esta casa debido al huracán Agnes que les obligó a abandonar su residencia en Wilkes-Barre. John y Mary decidieron comprar un dúplex en Pittson, y compartir la casa con su hijo y su familia: Jack, Janet, Shannon, Carin, Dawn y Heather.

Sin embargo, a los pocos meses una extraña mancha apareció en una alfombra nueva, la televisión de Jack estalló en llamas, había continuos problemas en las tuberías a pesar de haber sido cambiadas al mudarse, puertas de madera, el fregadero y la bañera se cubrieron de arañazos de animal... Los fenómenos continuaron durante años: cisternas que se vaciaban solas, pasos, cajones que se abren y cierran solos, radios que se encendían, olores agrios, mecedoras que se mueven, gritos e insultos…

En 1985, Janet Smurl escuchó cómo alguien la llamaba, pero al darse la vuelta se encontró sola. Días más tarde, una figura negra con forma humana se le apareció en la cocina. La sombra atravesó la pared y se le apareció a Mary en el lado opuesto del muro. Un ventilador de techo se cayó a pocos centímetros de Shannon la noche anterior a su confirmación.El perro de la familia fue lanzado contra las paredes en varias ocasiones.


"Los Smurl dijeron haber olido a humo y a carne podrida, oyeron gruñidos de cerdo, golpeteos de pezuñas, lamentos y gemidos que helaban la sangre a uno. Las puertas se abrían y cerraban de golpe y las luces se apagaban y encendían, resplandores fantasmas sin forma desfilaban ante ellos, y el aparato de televisión se desplazó por la habitación. Incluso el perro de la familia, un pastor alemán de 75 libras, fue golpeado contra una pared en presencia de (Jack) Smurl".

En 1986, la familia contrató a un par de demonólogos, Ed y Lorraine Warren, para que investigasen los sucesos. Los Warren habían estudiado anteriormente el caso de la casa de Amityville. Según Ed, había tres espíritus y un demonio muy poderoso. Trataron de persuadirle de que se fuera mediante música religiosa y rezos, pero respondió sacudiendo espejos y muebles. Ed afirmó que sintió un descenso en la temperatura y vio una masa oscura en la casa. Incluso en una ocasión, el demonio dejó un mensaje en un espejo diciendo “fuera de aquí”. Después de meses de investigación, poseía un gran número de grabaciones que contenían golpes y ruidos provocados por el demonio.

Los fenómenos continuaban: Jack fue violado por un súcubo escamoso con rostro de anciana y cuerpo de joven, Ed Warren sufrió un intento de estrangulación, Janet fue asaltada sexualmente y se oían ruidos de cerdo (que son propios de posesiones demoniacas graves).

Contactaron con el obispo Robert McKenna, que llevó a cabo una misa en latin y realizó un más de 50 exorcismos, pero solo consiguió enfurecer más al demonio, que comenzó a perseguir a los Smurl durante sus vacaciones y en sus trabajos. Una de las gemelas, Carin fue violada, Janet y Mary estaban cubiertas por arañazos y mordeduras. McKenna volvió a realizar un exorcismo. Ante la negativa de la Iglesia a ayudar a la familia, por lo que deciden aparecer en un programa llamado The People are Talking, moderado por Richard Bey. El demonio reaccionó violando a Jack y lanzando a Janet por los aires.

Se pusieron en contacto con una médium, Mary Alice Rinkman, que esaminó la casa y corroboró los hallazgos de los Warrens. De los cuatro espíritus identificó a dos: una anciana llamada Abigail y un hombre llamado Patrick que había asesinado a su esposa y su amante y posteriormente había sido ahorcado por una multitud.

John Smurl señala la pared donde, según algunos
psíquicos, se aparecía el espíritu de Abigail 

En 1986, poco antes de navidad, Jack volvió a ver a la sombra negra, que le hacia señas. Comenzaron de nuevo los golpes, los olores y las agresiones. Finalmente, los Smurl se mudaron a otra ciudad.

En 1988 la Diócesis de Scranton aprobó un exorcismo que parece que acabó con los fenómenos.

Se ha publicado un libro sobre la historia de la familia y en 1991 se estrenó una película llamada The Haunted.